“MEJOR HIJO DEL MUNDO”

Autor: Juanjo Méndez Cervantes


Mi madre a un me trata como si fuera un bebe, todas las noches antes de dormir me besa y me da su bendición para no tener pesadillas. Cada mañana al despertar mi madre me tiene sobre la mesa un pan y una taza de atole calientito.

Mi madre me consintió demasiado dándome todo lo que yo quería, lo tenía todo y termine teniendo nada. Mi madre siempre quiso lo mejor para mí, al terminar mi preparatoria me mando a estudiar a la mejor universidad de México, me compro los tenis de mejor marca, los pantalones, las camisas, los celulares y los calzoncillos de mejor marca.

Mi único error fue solo el no escuchar los sabios consejos de mi madre, y hoy no saben cómo me ¡arrepiento! De no haberla escuchado, de no practicarle lo que me pasaba, de no decirle “cuanto la amo” y de no haber aprovechado todo el tiempo que se perdió en un agujero negro.

Yo comprobé que el espíritu del D.F. cambia a las personas. Tiempo después de haber entrado a la universidad conocí ¡VAGOS! Que hicieron de mí una BASURA y que con el tiempo borraron aquel viril hombre que mi madre con tanto esmero cosecho.

Cada mañana yo se la hacía negra a mi madre, incluso llegue a GOLPEARLA! Enojado le decía que yo ya no era un NIÑO que yo era un HOMBRE y que ya me tenía hasta la madre su pinche atolito y sus galletitas… entonces ese día aquella mujer tan buena me dijo:

-¡hijo yo pensé que había criado a un ser humano pero tristemente veo que crie a un animal!

Entones me sentí como un perro que vaga sin camina y sin destino, entonces alce la voz y le conteste de una manera imperdonable:

-¡te odio! ¡No sé porque fui tu hijo! ¡¿Por qué me tuviste?! ¿Por qué? Si yo no te lo pedí, ¡¡no sabes cómo me arrepiento de que seas mi madre!!

Después de esas horribles palabras mi madre comenzó a llorar y yo Salí corriendo de mi casa. Por favor espero que algún dia me perones madre…desde la discusión que tuve con mi madre me fui a vivir al barrio inopio de mis CUATES empecé a consumir drogas porque me remolía la conciencia y no tenía el valor para decirle PERDON a mi madre. Bueno total que un dia uno de mis cuates nos dijo que asaltaríamos una tienda pero no dijo cual…!

Cuando llego ese día, como yo era el conductor me quede a la vuelta de la tienda que íbamos a asaltar, cuando de repente… escuche un disparo Salí corriendo del auto y mire que la tienda que habían asaltado era la tienda de mi MADRE!... entonces corrí con todas mis fuerzas hacia la tienda, sentía como el corazón me latía rápidamente que parecía salir de mi pecho.

Cuando llegue a la tienda mire… mire… tirada ensangrentada, aquel Ángel que le daba una razón a mi vida sombría, la impresión fue tan dura que no me podía mover, en ese momento mi mundo se tornó en un color gris y dejo de moverse, entonces uno de mis cuates me dice:

-vamos wey hay viene la chota!!

Y cuando al fin reaccione, saque mi arma y cabe con la vida de aquellos a quien yo les decía FAMILIA. Me quite la camisa, me arrodille ante de ella y estrechándola entre mis brazos le dije llorando:

-madre, no te mueras, perdóname, yo te AMO…

Entonces mi madre sin aliento de hablar me dice:

-“hijo mío yo te perdono, tu eres sangre de mi sangre… pero antes de marchar solo te pido, que te olvides de mí”

-madre no me pidas eso, pídeme lo que quieras pero no me pidas eso”. Sé que he sido el peor “HIJO DEL MUNDO” no te mueras mami, que yo he de cambiar te prometo que todas las mañanas yo preparare el desayuno, pasaremos más tiempo juntos y nunca más tendrás que trabajar ¡NO TE MUERAS POR FAVOR!

Entonces mi madre me abrazo, derramando su última lágrima, salieron de su boca las últimas palabras que decían:

-hijo, tú has sido el “MEJOR HIJO DEL MUNDO”

Estas fueron sus últimas palabras antes de morir. Estoy pagando mis pecados en una PRISIÓN FEDERAL, pero tiempo después la vida se encargó de ponerme mi castigo, termine en UN MANICOMIO. Ahora no se de mí y cada día es sombrío y oscuro.

-amigos… amen, valoren y cuiden a sus MADRES, cada día como si fuera el último, ámenlas por que nunca sabremos hasta cuándo tendremos la dicha de su cariño, amor y presencia mortal. “CUANDO LO TIENES TODO, NO TIENES NADA”.