utor: C. Raúl Rizo Navarro
14 - 02 - 13 Yurécuaro, Mich.
Soy un mortal
como cualesquiera
que puede morir sin saber
dónde, cuándo ni cómo.
Pero mientras vivo
como gozo tu amor,
tu simple mirada
acelera mis latidos,
al hablarme tu dulce voz
me siento levitar
y al contacto
de tus golosos besos
y de tu piel candente
yo soy un dios
mayor que los mitológicos
ninguno se me compara
soy todos ellos juntos
griegos, romanos, escandinavos.
Me sumerjo en el mar
de tus caricias
ardo en las llamas
de tu pasión
surco los aires
con nuestros suspiros
atravieso la tierra
con los latidos del corazón
al ritmo de nuestro amor
¡y todo al mismo tiempo!
Erupto cual volcán
con el susurro de tu voz
veo la inmensidad
de las galaxias
a través de tus hermosos ojos
cuando me me miras extasiada
llegando ambos al clímax.
Cumpliendo nuevamente
nuestra dosis de amor
que se repite
una y otra vez
hasta que al unísono
quedamos extenuados y felices.
Aterrizamos nuevamente
en nuestro planeta
porque la jornada
nos llevó a
miles de años luz y amor
que nos parecen pequeñas
fracciones de segundo
y vemos pasar
las constelaciones
como ráfagas de arco iris
con todas sus gamas.
El viento nos reanima
y estamos en el lugar
donde iniciamos
nuestro idilio,
pero,
si me miras nuevamente;
y me vuelves a besar...